MISERABLE HISTRIÓN
Escribe: Gualberto M. Mato
Nunca me sentí tan burlado y
engañado por un gobernante como al escuchar las declaraciones del ministro
Bonomi y sus subalternos diciéndonos que el operativo policial en el estadio el
día del clásico había sido un éxito. Peor aún fue escuchar a nuestro Presidente
desde Europa diciendo la perogrullada de que había que tener mano dura como si él
fuera ajeno a este problema, y afirmando a su vez que los jueces tenían que
procesar a más gente. Nunca pensé ser tratado como un nabo de la forma como nos
están tratando estos gobernantes. No tenía intenciones de escribir esta carta. Pero
el editorial de Juan M. Posadas del domingo pasado me convenció de lo contrario.
Afirma el cronista que el problema ya no son unos pocos inadaptados; el problema somos los adaptados, la gran mayoría que nos vamos adaptando a esta
debacle de nuestra sociedad, mientras que los gobernantes olímpicamente se ríen
una y otra vez de todos nosotros, menospreciando nuestra inteligencia en una
actitud arrogante que ya resulta insoportable. Como no quiero ser un “adaptado”,
al menos decidí expresar mi bronca.
Ministro váyase por favor,
Subsecretario váyase por favor.
Sean dignos, reconozcan vuestra ineptitud y no
sigan cometiendo esta sarta de horrores mientras buscan excusas inaceptables creyendo
que pueden seguir mintiéndonos impunemente. Hasta cuándo abusarán de nuestra
paciencia? Veamos brevemente los hechos y declaraciones màs relevantes en torno al
operativo mencionado que demuestran la sucesión de miserables y ridículos
argumentos dados por estos personajes.
I) Luego de una semana de
discusiones sobre si la policía debía o no ir a la Olímpica, si se habilitaba o
no, finalmente se habilitó la tribuna. Se vendieron cerca de 800. Fue la
expresión del miedo y el rechazo de la gente.
II) La Amsterdam estuvo “copada”
durante más de una hora sin que la policía interviniera. Esperaron afuera mientras
adentro asaltaban a los vendedores, tiraban garrafas desde lo alto, piedras y
lo que viniera. Me causó vergüenza ajena ver semejante espectáculo. La policía
no podía entrar! Ese fue el éxito?? Mientras tanto veíamos por TV a los
jerarcas policiales sin saber qué hacer en un febril ir y venir nervioso e
irresoluto.
III) Pero lo más indignante viene
en los días subsiguientes: soportar a Bonomi diciéndonos que el operativo había
sido un éxito; soportar al Jefe de Policía afirmando que su fuerza hizo lo
indicado; tener que escuchar al Perro diciendo que la culpa era de los
dirigentes por dar entradas gratis a los barrabravas. Pero ¿y para qué sirve la
Policía? Pusieron 1000 efectivos en las calles y resulta que no pudieron entrar
a la Amsterdam!! Y como corolario de tanto espanto, el bochornoso argumento de Bonomi
tratando de disimular torpemente su rotundo fracaso e ineptitud al denunciar que en una lista de candidatos de la oposición figuraba
un barrabrava!!! Habráse visto un argumento tan canallesco, artero y tan
tonto!!! Ministro, la culpa es enteramente suya, suya y de su gente, no busque
excusas.
IV) Capítulo aparte lo constituye
el Presidente. Desde Europa dijo las perogrulladas a las que nos tiene
acostumbrados: que había que tener mano dura con esta gente!!!! Pero entonces
¿qué hicieron él y su partido en estos 12 años que gobernaron con mayorías
absolutas? ¿Recién ahora se da cuenta? Vamos Presidente, no somos tan idiotas. ¿No
fue su propio Ministro Bonomi, deduzco que con su anuencia, quién impulsó la
política de dar entradas gratis a los referentes de los barrabravas? Pero no
contento con esa afirmación, tras cartón arremetió contra el Poder Judicial afirmando
que los procesados por estos hechos eran muy pocos. Los jueces y Ministro de la
Corte respondieron con demasiada delicadeza a tal exabrupto. Fue una
demostración más de la impotencia que lo agobia; trata inútilmente como los
demás de desviar el foco del problema para descargar en otros lo que él y su
gobierno no saben y no pueden resolver. Y como si todo lo anterior fuera poco,
en estos días sacan a la luz una investigación secreta que según ellos llevaba
varios meses; resulta por lo menos sospechoso que justamente se dé a publicidad
esta investigación unos días después del papelón. Lo único que han hecho es hablar,
burlarse de todos nosotros y dar golpes en la oscuridad, sin saber dónde pegar.
Me recuerdan aquella frase de un
editorial del diario El Debate dirigida a un connotado dirigente político de
entonces:” Miserable histrión, las charcas te reclaman”.